Mientras el empresario colombo-venezolano Jorge Pacheco anda en un tour de medios tratando de demostrar que tiene el músculo financiero para comprar Monómeros S.A., la poderosa productora de fertilizantes que funciona en Barranquilla pero que pertenece a Venezuela, desde otras orillas no ven despejado el negocio.
EL TIEMPO reveló este fin de semana el borrador de un contrato de compra-venta en el que se habla de 350 millones de dólares. Pero la firma de Pacheco -Nitrofert Asset Management SAS- que adquiriría los activos tangibles e intangibles de Monómeros, fue creada hace apenas tres meses (octubre de 2024) con 100 millones de pesos.
Socio en Delaware
Aunque Pacheco no quiso revelarle a EL TIEMPO quiénes serían sus socios en la millonaria compra, este diario investigó y estableció que la dueña de Nitrofert Asset Management es, a su vez, una empresa: Agroinvest Capital LLC.
Allí aparece como único representante el propio Pacheco. Esta fue abierta en Delaware (Estados Unidos), en septiembre de 2023, un estado considerado ‘paraíso fiscal’ por sus reglas flexibles.
Y aunque Pacheco asegura tener «solvencia de sobra» para sellar el negocio, EL TIEMPO reveló documentos en los que se consigna la preocupación de algunos sectores en Caracas y en el propio Monómeros porque se le extraigan los activos a la empresa y se deje un cascarón vacío que no responda por las acreencias y carga laboral.
¿Pulso con Caracas?
En efecto, mientras el barranquillero Álex Saab -investigado por lavado en Estados Unidos, y ahora ministro del Poder Popular de Industrias del régimen de Nicolás Maduro- impulsa la venta de Monómeros; en Colombia hay dudas.
El propio presidente Gustavo Petro le hizo saber al ahora presidente de facto Nicolás Maduro que se opone integralmente a una privatización de Monómeros.
Y, en entrevista con EL TIEMPO, Billy Escobar, superintendente de Sociedades, aseguró que, tras la revelación de este diario de conversaciones de Pacheco con Saab para sellar el negocio, «están vigilantes para que no vacíen la empresa vendiendo sus activos y que quede el cascarón vacío».
El superintendente también dijo que están analizando la apelación de Monómeros sobre el sometimiento a control sobre la empresa que la entidad ordenó en diciembre pasado: «Se resolverá a finales de enero».
Y reveló que la última alerta que emitió la Supersociedades sobre Monómeros, en el anterior sometimiento a control fue por un «riesgo potencial en el pago de trabajadores y acreedores».
Adicionalmente, este diario conoció un acta reservada, del pasado lunes 13 de enero, en el que ejecutivos de Monómeros analizan el artículos de EL TIEMPO sobre la venta de la compañía y recomiendan frenar la negociación con Pacheco.
«Teniendo en cuenta que el señor Jorge Luis Pacheco Hernández, pone en conocimiento público que existe un Memorando de Entendimiento entre las partes, y en el caso de que así sea, se recomienda no continuar adelantando ningún tipo de acto o negocio hasta tanto no se cuente con la autorización del máximo órgano de gobierno de Monómeros S.A y Ecofértil S.A.», se lee en el acta.
Y agregan: «En caso de que el gerente general decida continuar con el acto o negocio propuesto públicamente por el señor Jorge Luis Pacheco Hernández, se recomienda convocar a la Asamblea General de accionistas, incluyendo el punto relativo de sometimiento a consideración del máximo órgano social del acto o negocio jurídico, respecto del cual exista o pueda existir conflicto de intereses o competencia con la sociedad».
EL TIEMPO se comunicó con el gerente de Monómeros, Iván Sánchez, quien confirmó que el comité de conflicto de intereses de la compañía sí se reunió, pero dijo que no había revisado ningún acta.
La OFAC
En cualquier caso, Estados Unidos tiene la última palabra sobre el futuro de Monómeros.
La licencia especial que la OFAC le extendió para que siga funcionando a pesar de las sanciones al régimen de Maduro, expira en julio.
Y no se descarta que cuando Donald Trump asuma la Presidencia amplíe las sanciones al presidente de facto, a su camarilla y a otras empresas.
Al respecto, Pacheco -quien le admitió a EL TIEMPO que ya se reunió con Saab en Caracas- señaló que una nueva sanción se convertiría en «la implosión de Monómeros».
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