Las autoridades de Trinidad y Tobago comenzaron la deportación de los venezolanos detenidos el fin de semana pasado cuando fue asesinado un bebé a manos de la Guardia Costera del país vecino.
En ese sentido, el comisionado de la Organización de Estados Americanos (OEA) para la crisis de migrantes y refugiados venezolanos, David Smolansky, aseguró que la expulsión de estos venezolanos fue hecha para evitar que dieran sus testimonios de lo que ocurrió en el peñero donde fue disparado el bebé migrante venezolano.
COMUNICADO
El gobierno de Trinidad y Tobago en coordinación con el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro ha deportado a 35 de los 39 migrantes y refugiados venezolanos que iban en el peñero donde fue disparado el bebé, Yaelvis Santoyo Sarabia.
La expulsión de estos venezolanos fue hecha para evitar que dieran sus testimonios de lo que ocurrió en el peñero donde fue disparado Yaelvis, ya que todos fueron testigos de lo que hizo la Guardia Costera de Trinidad.
Los 4 inmigrantes que quedan en la isla son la madre (aún en el hospital), la hermana y el papá del bebé (ya vivía en la isla), así como presuntamente el “capitán” del peñero.
Velamos por la salud de Darielvis, así como su protección y la de su familia donde se les garanticen sus derechos como refugiados después de que mataran a su hijo.
El Ministerio Publico de Trinidad debe agilizar una investigación de lo ocurrido, así como los organismos competentes en el sistema Interamericano y el sistema de Naciones Unidas.
¡Justicia para Yaelvis!
Es el bebé de toda Venezuela.
David Smolansky
El régimen de @NicolasMaduro que hipócritamente dijo haber lamentado la muerte del bebé en las costas de Trinidad y Tobago acaba de coordinar con el gobierno de la isla la deportación de todos los migrantes venezolanos que iban en el peñero para evitar que hablaran como testigos.
— David Smolansky (@dsmolansky) February 11, 2022
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