Los hurtos constantes de los cables eléctricos de los semáforos así como el vandalismo en las paradas del transporte público de la ciudad, son la prueba indiscutible del deterioro de la señalética que se evidencia en San Cristóbal, de acuerdo a Richard García, jefe de la división de Vialidad y Tránsito de la alcaldía.
Carlos A. Ramírez B. | La Prensa del Táchira
García expresó que estos factores se suman a la falta de un presupuesto adecuado para la compra de los repuestos necesarios tanto para semáforos como para la recuperación de las estructuras que sirven de paradas. «En la actualidad reutilizamos todo lo que tenemos a la mano (…) los repuestos, que son pocos, se generan de los semáforos que ya están inutilizables».
El jefe de la División de Vialidad expresa que las acciones que se han generado, junto a Corpoelec, para la colocar nuevamente el cableado de los semáforos son constantes, pues pese a que se sellan las tanquillas, como medida preventiva, los hurtos continúan desmejorando un servicio que ya se ve disminuido por las constantes fallas del fluido eléctrico.
«Tenemos que soldar las tanquillas para por lo menos tratar de asegurar que no haya más hurtos (…) los sectores más afectados son la 5ta. y 7ma. avenida sumado a la avenida Carabobo».
En el caso de las paradas, el ingeniero, acotó que los proyectos que se emprendieron desde la alcaldía fueron paralizados por la falta de recursos y a esto se suma, la injerencia de «gobiernos paralelos» que se adosan responsabilidades que después no cumplen.
«En el 2017 se vandalizaron muchas de las paradas y aún no se han podido reponer con el mismo tipo de material (…) la falta de recursos limita los trabajos».
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