La Iglesia venezolana expresó su dolor e indignación por el fallecimiento del pemón preso político Salvador Franco, ocurrida en los calabozos de la dictadura de Nicolás Maduro el pasado domingo 3 de diciembre, luego de que se le negara la atención médica.
En ese sentido, la Iglesia se solidarizó con la comunidad Pemón y las familias de los 13 detenidos por el régimen chavista en 2019, siendo inocentes.
Ante esto, exigen atención médica para los indígenas detenidos, que las autoridades correspondientes agilicen el juicio garantizando el debido proceso y un trato digno.
En cuanto a la muerte de Salvador Franco, exigen una investigación exhaustiva para que los responsables de este hecho paguen ante la justicia.
«La muerte del indígena Salvador Franco no debe quedar impune», sentenciaron.
Comunicado completo:
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