El vicepresidente de la Asociación de Industriales Latinoamericanos, expresidente de Conindustria y presidente de FUNDEI, Juan Pablo Olalquiaga, advirtió que sostener el esquema 7+7 es nocivo para las empresas que siguen en el país y profundizará aun más la contracción de la economía.
Explicó que a diferencia de otros países que disminuyeron el cobro de impuestos por la pandemia, en Venezuela no se implementaron políticas financieras que favorezcan a las empresas y a los ciudadanos durante el confinamiento.
«A las economías organizadas eso les costó parte importante de sus reservas, pero permitió que la población transitara este periodo, sin un trauma de empobrecimiento que los inhibiera de adquirir sus productos básicos», enfatizó.
Olalquiaga aseguró que el no otorgar créditos especiales por esta contingencia, aunado a la interrumpida operatividad de los comercios por el modelo que ha ordenado el Ejecutivo nacional, no ha hecho más que consumir el flujo de caja en un contexto de hiperinflación.
En entrevista concedida al programa A Tiempo de Unión Radio denunció que los empleadores de diversos sectores deben lidiar con la extorsión de funcionarios para que se les permitan circular o abrir por más tiempo en semanas radicales.
Subrayó que una legislación sobre Zonas Económicas Especiales, no va a resolver la ausencia de políticas públicas que estimulen la economía en su conjunto, ni los efectos que han causado el romper las cadenas suministros.
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