Wendell Grissom, de 56 años, fue ejecutado la mañana de este jueves mediante inyección letal en la Penitenciaría Estatal de Oklahoma, ubicada en McAlester, según informó The Associated Press (AP).
La ejecución, que tuvo lugar a las 10:13 horas, tiempo local, marcó la primera aplicación de la pena capital en el estado en lo que va del año. Grissom había sido condenado por el asesinato de Amber Matthews, una mujer de 23 años, y por herir a su amiga, Dreu Kopf.
De acuerdo con los detalles proporcionados por AP, el crimen tuvo lugar en la residencia de Kopf, en el condado de Blaine, Oklahoma. Grissom, junto con un cómplice identificado como Jessie Floyd Johns, irrumpió en la vivienda de manera aleatoria con la intención de cometer un robo.
La primera ejecución en Oklahoma en lo que va del año
Durante el ataque, Matthews fue asesinada de dos disparos en la cabeza, mientras que Kopf, quien también recibió dos disparos y resultó gravemente herida, logró escapar en el vehículo de Grissom para buscar ayuda.
Tras cometer el crimen, los dos hombres huyeron del lugar en una cuatrimoto robada. Sin embargo, su intento de escape fue frustrado rápidamente cuando el vehículo se quedó sin combustible. Posteriormente, fueron capturados después de pedir un aventón hasta un café en un condado cercano.
Los hijos de Kopf fueron encontrados aún dentro de la casa por las autoridades. Todos estaban ilesos. Matthews, por otro lado, murió mientras era trasladada en un helicóptero a un hospital de Oklahoma City.
Mientras que Wendell Grissom fue condenado a muerte por su participación en el asesinato de Amber Matthews, su cómplice, Jessie Floyd Johns, recibió una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. Ambos hombres enfrentaron cargos por el ataque que dejó a Matthews sin vida y a Kopf gravemente herido.
Los abogados de Grissom no pusieron en duda su culpabilidad, no obstante, argumentaron durante una audiencia de clemencia que sufría daño cerebral que nunca fue presentado ante el jurado. La Junta de Indultos y Libertad Condicional del estado denegó su solicitud.
Ellos afirmaron ante la junta que su cliente siempre aceptó la responsabilidad y argumentaron que escribió una disculpa dirigida a la familia de Matthews durante su primera entrevista con la policía.
“Él no puede cambiar el p asado, pero ahora está y siempre ha estado profundamente avergonzado y arrepentido”, añadió Kristi Christopher, abogada de la oficina del defensor público federal.
Por su parte, Kopf dijo que aún conserva profundas cicatrices mentales y físicas del ataque. “Viví en un estado de miedo intenso en todo momento”, afirmó entre lágrimas.
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