Portugal registró hoy un incremento en el número de hospitalizados, que vuelven a superar la barrera de los 900, en tanto que prosigue con una tendencia a la baja en contagios diarios, que se cifraron en 2.306.
Según el último boletín de la Dirección General de Salud (DGS), en las últimas 24 horas se han notificado 8 muertes y 2.306 nuevas infecciones, una cifra inferior a la registrada el día anterior (2.590).
No obstante, los datos de hoy son referentes al sábado, y es habitual que durante el fin de semana los números sean inferiores porque se procesan menos pruebas covid.
En lo referido a presión hospitalaria, la situación volvió a empeorar y una jornada después de que se bajara de la barrera de los 900 ingresados volvió a superarse: hay ahora 923 pacientes covid hospitalizados en Portugal (28 más que el día anterior) de los cuales 200 están en cuidados intensivos (cinco más).
Mientras, la incidencia a 14 días, tras la escalada vivida en las últimas semanas, ha descendido esta semana y se sitúa actualmente en 419,2 casos por 100.000 habitantes.
El R(t), que mide el número de personas a las que contagia un infectado, es de 0,98, volviendo a situarse por debajo de 1 por primera vez en dos meses y medio.
Portugal, con 10 millones de habitantes, suma desde que empezó la pandemia 970.937 casos confirmados y 17.369 fallecimientos.
Portugal comienza hoy un plan de tres fases para aliviar las restricciones impuestas por la covid progresivamente hasta octubre, una iniciativa del Gobierno basada en el avance de la vacunación y que permite desde hoy acabar con el toque de queda y recuperar gran parte de la vida nocturna del país.
Este domingo, día en que el 57 % de la población está inmunizada, arranca la primera fase, en la que se unifican normas para todo el país y comercio y restaurantes recuperan sus horarios normales, pudiendo abrir hasta las dos de la madrugada.
Además, se elimina el toque de queda a partir de las 23.00 que estaba en vigor en los municipios con mayor incidencia, entre ellos Lisboa y Oporto.
Otras medidas de esta fase son que el teletrabajo pase de obligatorio a recomendado, o el certificado o test negativo también pase a ser exigido para clases de grupo en gimnasio, eventos culturales y deportivos, casinos y spa.
Según el plan del Gobierno, la segunda fase comenzará cuando el 70 % de la población esté inmunizada, algo que se prevé suceda a primeros de septiembre, momento en que habrá más alivios, como acabar con la obligatoriedad de llevar la mascarilla en la calle.
EFE
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