La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, cesó en sus funciones al ministro de Defensa, Luis Fernando López, después de haberlo ratificado el fin de semana, ante la petición de destitución del Congreso.
El titular del despacho castrense, recibió el viernes pasado un voto de censura del Parlamento, controlado por el partido del expresidente Evo Morales. La medida fue en represalia por no asistir a las interpelaciones sobre los conflictos sociales de octubre y noviembre de 2019 que dejaron 36 muertos.
El Congreso demandó al poder Ejecutivo su destitución, ya que, argumentó, está establecido en la Constitución.
Sin embargo, Áñez ratificó el sábado a López en el cargo. La presidenta arguyó que gozaba de su confianza y que había realizado un «gran trabajo» por la «pacificación del país».
La mandataria firmó este lunes un decreto supremo para designar de manera temporal al viceministro de Defensa, Ramiro Peñaloza, como ministro interino del área hasta la nominación del titular.
Núñez adelantó que el nuevo ministro se conocerá el lunes.
A raíz del incidente del ministro de Defensa, el gobierno de Áñez señaló que no caerá en presiones políticas de los partidarios del exmandatario Morales, asilado primero en México y luego en Argentina, tras dimitir el 10 de noviembre pasado por una fuerte convulsión social.
AFP
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