Miguel Abreu, un venezolano que residía en Chile, caminó por la selva del Darién junto a su perrita y fiel compañera, Becki, con quien se encuentra actualmente viviendo el sueño americano en los Estados Unidos.
El joven asegura que nunca se separará de su compañera: “Si me van a separar de mi mascota, me deportan a mi país o yo me regreso, pero en realidad nunca me voy a separar de mi mascota».
«Ese es como un hijo mío, tú no puedes quitarme a mí ese ser querido. Tú no sabes todo el significado que tiene mi mascota para mí, si lo entendieras supieras que no la voy a abandonar”, dijo en una entrevista que concedió a Telemundo.
El joven conoció a su perrita cuando migró de Venezuela a Chile. Él la rescató y desde entonces se volvieron inseparables. Juntos, recorrieron 12 países durante aproximadamente seis meses.
Durante su travesía por el Tapón del Darién, en la frontera entre Colombia y Panamá, la mascota de Miguel Abreu caminó poco, pues casi siempre la llevaba cargada.
“Me tocó a veces dormir en la calle y la que estaba conmigo era ella, yo pasaba frío y ella estaba al lado mío pasando frío ¿Cómo yo puedo abandonar al mejor amigo que ha estado conmigo en lluvia, en frío?”, contó Abreu.
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