Los países y organizaciones árabes de Oriente Medio expresaron hoy sus condolencias por la muerte del presidente de Emiratos Árabes Unidos (EAU) y gobernante de Abu Dabi, Jalifa bin Zayed Al Nahyan, que falleció hoy a los 73 años de edad por causas que todavía se desconocen.
En un comunicado, el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abulgueit, lamentó «con profunda tristeza y dolor» la muerte del mandatario emiratí, cuyos «méritos y hazañas» dejarán huella «en la conciencia colectiva árabe para las generaciones presentes y futuras», consideró.
Abulgueit manifestó su apoyo al liderazgo emiratí y ordenó que la bandera de la organización panárabe ondee a media asta durante tres días, en señal de duelo, según la nota.
De la misma forma, Nayef Falah Mubaraj Hajraf, el secretario general del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), que agrupa a las principales potencias del golfo Pérsico, lamentó la muerte del presidente de EAU, quien «sirvió a su pueblo y a su nación, así como a las naciones árabes e islámicas», según declaraciones recogidas en un comunicado.
Por su parte, el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, lamentó en un mensaje en Twitter el fallecimiento «de uno de los hombres más preciados y uno de los más grandes líderes» que llevó a «que Emiratos se convirtiera en un modelo de desarrollo y modernidad en la región y el mundo».
También el rey Abdalá II de Jordania recordó que el presidente Jalifa «heredó la sabiduría de su difunto padre, el jeque Zayed», el fundador de la federación de EAU, y que durante su mandato «dedicó su vida a servir a su país», según un comunicado de la Corte Real.
Las autoridades de Baréin, además, declararon tres días de luto oficial y que las banderas nacionales ondeen a media asta, de la misma manera que lo han ordenado otros países del golfo Pérsico como Kuwait u Omán.
Asimismo, los líderes del Líbano y Siria también expresaron sus condolencias a Emiratos, mientras que el primer ministro de Irak, Mustafa al Kazemi, manifestó su confianza en que «el camino pionero del difunto continuará con los esfuerzos de los líderes y del pueblo».
Por otra parte, las misiones diplomáticas de los países occidentales en Emiratos también expresaron su pésame, y la embajada estadounidense calificó a Jalifa como «un verdadero amigo de Estados Unidos».
Nacido en 1948, Jalifa asumió la presidencia del EAU tras la muerte en 2004 de su padre y lideró la puesta en práctica en el país de numerosos proyectos de modernización y desarrollo, además de inversiones de miles de millones de dólares hasta que en 2014 sufrió un derrame cerebral que le apartó de la escena pública. EFE
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