Un adolescente de tan solo 16 años confesó ante la policía un crimen que le pondría los pelos de punta a cualquiera. Y es que admitió haber asesinado a dos hermanitos de 3 y 5 años, y que incluso los enterró en un cerro con aún con vida. Todo ocurrió en el centro poblado Alto Trujillo del distrito de El Porvenir, Perú.
Por trome.pe
Bajo estrictas medidas de seguridad, agentes de la Sección de Homicidios de la Divincri acompañaron al joven, quien contó que la tarde del último lunes aprovechó que sus víctimas jugaban a unos metros de su casa para llevárselos.
“El mayor de ellos tenía un celular y primero los llevé a la tienda que está a dos o tres puertas de mi casa, les compré galletas y les dije que me acompañen”, declaró.
Luego fue hasta una esquina, volteó a la derecha, caminó dos cuadras y llegó hasta la avenida principal de esa zona. Giró hacia la izquierda, se detuvo un rato, les dio un pedazo de pan y siguieron su camino con dirección al barrio 6E, que está en el asentamiento humano Armando Villanueva del Campo.
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