Aunque el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) todavía no lo proclama ganador, el izquierdista Pedro Castillo se perfila como el próximo presidente de Perú.
Pierina Pighi Bel // BBC MUNDO
El candidato de Perú Libre obtuvo el 50,125% de los votos frente al 49,875% que obtuvo su rival, Keiko Fujimori, de Fuerza Popular, de acuerdo con los resultados de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).
Pero desde que acabó el conteo, la declaración oficial del vencedor se ha retrasado y el proceso ha causado más incertidumbre de la usual debido a la renuencia de Fujimori a aceptar su derrota, a las acusaciones de fraude electoral —sin pruebas— que lanzó Fuerza Popular, a sus pedidos de anulación de actas electorales, a las protestas en las calles, a la inesperada renuncia de un funcionario electoral, e incluso a la difusión de una carta de militares en retiro que les pedían a los mandos en actividad desconocer al presidente que proclame el JNE.
Estas y otras circunstancias han despertado preocupación por la estabilidad de la democracia peruana, al punto que algunos analistas las describieron como parte de un “golpe lento” o un “golpe blando”.
Cuando la JNE termine de revisar los pedidos de nulidad de actas, si no falla en favor de Fujimori, podrá entregarle las credenciales de mandatario a Castillo, quien asumiría el cargo el 28 de julio para gobernar hasta julio de 2026.
Lee la nota completa en BBC MUNDO
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.