En una decisión histórica y controversial, el Estado colombiano deberá pagar 130 millones de pesos, que equivalen a 33.000 dólares, al opositor venezolano Lorent Saleh, deportado a Venezuela en el Gobierno de Juan Manuel Santos y preso por cuatro años en Caracas.
Por El Tiempo
Esta indemnización se da por “graves irregularidades” en su proceso de expulsión de territorio colombiano. El juzgado 58 administrativo de Bogotá ha determinado que el procedimiento fue irregular, por lo cual Migración Colombia deberá pagar una indemnización al activista y a su madre por los daños causados.
Se trata de una decisión de 32 páginas en las que se explica que a Saleh se le negó su derecho de ejercer defensa y no se tomó en consideración, la compleja situación de vulnerabilidad a la que se le exponía si regresaba a Venezuela, pues era solicitado por el Gobierno de Maduro, del cual hay denuncias de haberlo torturado.
“¡Ningún venezolano debe ser entregado a la dictadura venezolana!”, escribió Saleh en sus redes al conocer la decisión, que fue difundida por su abogado en Colombia, Víctor Mosquera.
Los hechos
El año 2014 fue bastante convulso para Venezuela. Maduro recién llegaba al poder tras la muerte de Hugo Chávez y se desataron protestas y manifestaciones. Se crearon agrupaciones para hacer frente al Gobierno, entre ellas ‘Operación Libertad’, una organización que lideraba Saleh y que lo llevó a conectar con personalidades colombianas adversas al chavismo.
Saleh tenía fotos con Álvaro Uribe y Juan Carlos Pinzón. En sus redes sociales decía que había empezado estudios en la Escuela Superior de Guerra colombiana, pero desde Venezuela se le acusaba de gestar un plan terrorista y querer asesinar a Maduro.
El 4 de septiembre de 2014, tras solicitud del Gobierno venezolano, Juan Manuel Santos deportó al joven, alegando que estaba de irregular en Colombia, aunque Saleh aseguró que estaba tramitando sus permisos.
La policía colombiana lo interceptó en Bogotá y luego fue entregado en la frontera al Servicio Bolivariano de Inteligencia de Venezuela (Sebin). Tras no conocer su paradero, fue trasladado en helicóptero al Palacio de Justicia en Carabobo, a unas dos horas de Caracas y luego recluido en el Sebin del Helicoide por cuatro años.
En 2017, Saleh fue uno de los ocho presos políticos venezolanos reconocidos con el premio Sájarov por el Parlamento Europeo.
El 12 de octubre de 2018, como parte de una negociación, Saleh fue liberado y desterrado a España, su madre también abandonó el país. El joven ha seguido denunciando los abusos de lo que asegura es “la dictadura” venezolana.
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