Matías Capuleto, coordinador del Grupo de Puebla (GP), ha salido al paso de la polémica en torno a la postura que mantiene este foro de dirigentes izquierdistas, populistas y revolucionarios en torno al fraude electoral en Venezuela. Capuleto ha asegurado al Diario Red que es importante dar los votos desgranados (por mesas) en el plazo de 30 días «porque aún no sabemos quién fue tercero, cuarto o quinto. El Gobierno venezolano dice que hubo un hackeo, lo que parece que es real».
«Alguien tiene, ya sea el Supremo o el Consejo Nacional Electoral, que aportar la información pública», añadió convencido, pese a que no pone en duda la «victoria» de Nicolás Maduro. «Veo bien la denuncia judicial que presentó Maduro para que sea la justicia la que haga el recuento de las actas», divagó.
En cuanto a la postura de Zapatero, polémica tras su silencio de la semana pasada y por el lobby realizado entre dirigentes de la región para evitar que Maduro sea señalado, Capuleto señaló: «Zapatero viene teniendo un compromiso muy importante con todos los sectores políticos venezolanos, es una figura reconocida en todo el país. Él formó parte de la observación y yo le he visto muy comprometido con el desarrollo normal del proceso. En esta ocasión, no he podido hablar con él, pero sé que reclama igualmente las actas».
Capuleto no escondió su contrariedad ante la postura firme del presidente progresista de Chile, Gabriel Boric, quien en las últimas horas ha insistido en que «no tengo dudas de que Maduro ha intentado cometer fraude y está cometiendo graves violaciones de derechos humanos. Chile no reconoce el triunfo autoproclamado de Maduro». Para el coordinador del GP, «desconocer los resultados e insultar a Maduro no ayuda en nada. No echemos más leña al fuego, hagamos que los incendios no nos lleven a desastres mayores. Eso es lo que impulsa la derecha internacional».
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