El ejército de China derribó una presa para liberar las aguas que amenazan una de sus provincias más densamente pobladas, ya que el número de muertos en las inundaciones generalizadas aumentó a al menos 25.
La operación de la presa se llevó a cabo el martes por la noche en la ciudad de Luoyang, justo cuando las graves inundaciones abrumaron la capital provincial de Henan, Zhengzhou, atrapando a los residentes en el sistema de metro y dejándolos varados en escuelas, apartamentos y oficinas.
Otras siete personas fueron reportadas como desaparecidas, dijeron funcionarios provinciales en una conferencia de prensa.
Un video publicado en Twitter por el sitio de noticias The Paper mostró a los pasajeros del metro parados en agua marrón fangosa hasta el pecho mientras los torrentes rugían en el túnel exterior.
El transporte y el trabajo se han visto interrumpidos en toda la provincia, y la lluvia ha convertido las calles en ríos que fluyen rápidamente, arrastrando los coches y llegando a los hogares de las personas.
Al menos 10 trenes que transportaban a unos 10.000 pasajeros se detuvieron, incluidos tres durante más de 40 horas, según Caixin, una revista de noticias comerciales. Se cerraron secciones de 26 carreteras debido a la lluvia, dijo el Ministerio de Transporte en su cuenta de redes sociales.
Un apagón apagó los ventiladores en el Primer Hospital Afiliado de la Universidad de Zhengzhou, lo que obligó al personal a usar bolsas de aire bombeadas a mano para ayudar a los pacientes a respirar, según el comité del Partido Comunista de la ciudad. Dijo que más de 600 pacientes estaban siendo trasladados a otros hospitales.
Una mujer a bordo de un metro en un túnel inundado le dijo a su esposo que el agua casi le llegaba al cuello y los pasajeros tenían problemas para respirar, informó el periódico Henan Business Daily.
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