La hiperinflación, generada por la mala gestión económica de los regímenes de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, continúa pasándoles factura a los venezolanos.
En la actualidad, el sueldo mínimo establecido por la dictadura no alcanza ni para comprar 10% de la canasta alimenticia, lo cual obliga a la mayoría de los ciudadanos a mantener una dieta desbalanceada, lo que conlleva a la desnutrición.
“El sueldo de Bs. 400 no alcanza siquiera para una harina pan, ni siquiera para la arepa de un venezolano”, dijo Judith Márquez, ama de casa.
El consumo de carnes y embutidos es el más afectado, dado que el salario mínimo no alcanza para comprarlos.
Los negocios de charcutería y embutidos, aseguraron que 30% de sus ventas se hacen en gramos, debido a que los clientes no pueden comprar en grandes cantidades.
“Nosotros vendemos a partir de 100 gramos, por lo menos, 1k de queso que vale millón doscientos, vendemos 100gr que son Bs.1.200 y lo compran. Así es que está comprando la gente”, explicó Elio Acosta.
Frente a las pocas ventas, los comerciantes se han visto en la obligación de cerrar o cambiar de rubro.
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