Bajo una intensa lluvia en Rio de Janeiro, Perú inició este viernes la recta final de su preparación para la final de la Copa América 2019 ante la Seleçao, una práctica matizada por una baja temperatura en la sede deportiva del Fluminense.
El comienzo del entrenamiento en el sector de Barra da Tijuca, en el oeste de la ‘Cidade Maravilhosa’, sufrió un retraso de al menos 45 minutos respecto al horario programado (13H00 GMT) por la Federación Peruana (FPF) debido a las fuertes precipitaciones y la presencia de rachas de viento.
En medio de este panorama, el elenco inca realizó livianos movimientos en la cancha principal del complejo del ‘Fluzao’ y en estos participaron sin problemas los extremos Édison Flores, autor de uno de goles en el 3-0 ante Chile en las semifinales, y André Carrillo, ambos con inconvenientes físicos.
Los dos jugadores habían terminado con molestias tras el duelo con La Roja el pasado miércoles en Porto Alegre (sur).
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Flores, jugador del Monarcas Morelia, sustituido a los 50 minutos por Christofer Gonzales por un golpe en el tobillo derecho y que lo obligó a someterse el jueves a una resonancia magnética, realizó trabajos diferenciados, pero estará a punto para el partido del domingo.
Carrillo, del Al-Hilal, reemplazado por Andy Polo a los 71 por calambres, también se realizó estudios pero éstos no arrojaron lesiones musculares, quedando apto para el choque en el Maracaná.
Campeón de la Copa América en los lejanos 1939 y 1975, Perú disputará su segunda final y lo hará por primera vez en los 103 años de historia del torneo contra Brasil, que venció a Argentina 2-0 en la primera semifinal, el martes.
Los incas realizaron una campaña discreta en la fase de grupos (empate 0-0 con Venezuela, victoria 3-1 ante Bolivia y derrota 5-0 con Brasil) y en los cuartos de final eliminaron a Uruguay por penales 5-4 después de un 0-0 en los 90 minutos.
AFP
