El ente rector de la Fórmula Uno advirtió a Ferrari sobre los riesgos de incumplir el protocolo del deporte sobre el COVID-19 y su “burbuja” de protección.
Los pilotos de Ferrari Charles Leclerc y Sebastian Vettel fueron vistos mezclándose con gente ajena a los grupos de sus escuderías.
Leclerc volvió a su casa de Mónaco tras terminar segundo en el Gran Premio de Austria del pasado domingo, mientras que Vettel fue mostrado en televisión hablando con los jefes de Red Bull sin mascarillas en el paddock del circuito Red Bull Ring.
“Ferrari ha recibido un recordatorio y ha sido advertida de que nuevas rupturas del código del COVID-19 podrían ser reportadas a los jueces”, dijo un portavoz de la FIA.
Asimismo, agregó que la advertencia tiene que ver más con respetar el sistema de grupo y la necesidad de distanciamiento social más que con los viajes de Leclerc.
El código de la FIA sobre el COVID-19 indica que cualquier tiempo fuera del espacio cerrado “debe pasarse con otros miembros del mismo grupo, manteniendo al mínimo la interacción con personas ajenas a ese grupo”.
El piloto de Mercedes Valtteri Bottas, que ganó el pasado domingo, también viajó a su casa en Mónaco tras la carrera inaugural, pero siguió dentro de su “burbuja”, ya que solo estuvo con su novia y su entrenador.
Algunos jefes de equipo también salieron del circuito Red Bull Ring, incluido el de McLaren, Zak Brown.
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