España se coronó campeón del Mundial Femenino el último domingo tras vencer a Inglaterra en el Accord Stadium, pero la primera consagración de la historia de ese país en esa rama quedó en un segundo plano por el escándalo sucedido con el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, quien le dio un beso a Jenni Hermoso sin su consentimiento en plena ceremonia de premiación.
Una de las protagonistas de aquella final (falló un penal), se transformó en noticia por un hecho alejado a lo futbolístico y puso bajo la lupa el accionar del dirigente, hasta el punto de plantear su dimisión al cargo. Por lo pronto, la jugadora del Pachuca de México evitó dar mayores precisiones sobre lo sucedido a la prensa y aprovechó los días posteriores al término de la Copa del Mundo para compartir una vacaciones con muchas de sus compañeras en la Furia Roja.
El destino elegido por las dirigidas por Jorge Vilda fue Ibiza. Una de las islas Baleares localizadas en el mar Mediterráneo tuvo la presencia de distintas campeonas del mundo y Hermoso aprovechó sus redes sociales para mostrar uno de los tatuajes que se realizó en su estadía en medio de la polémica que la envuelve involuntariamente. “#Nohayveranosinbeso”, decía el grabado en la piel de la mujer de 33 años.
Más allá de no saber como se rubricó la frase en su pierna izquierda, cabe una posibilidad que se deba a una calcomanía temporal, debido a que esa misiva es el slogan de Beso Beach, uno de los restaurantes de moda situado en la playa de Las Salinas, localidad de Mallorca. Ese lugar se destaca por la mezcla de magia, baile, diversión y cocina vasco-mediterránea y el propio establecimiento entrega a todos sus clientes una pegatina con el mensaje en cuestión. De hecho, Alexia Putellas también publicó una historia en su cuenta personal de Instagram para dar cuenta de ese hashtag.
Sin lugar a dudas, el momento de la publicación contribuye a agregar un condimento más a lo acontecido en Sydney, luego de que Hermoso haya volcado su opinión en un comunicado realizado por la Asociación de Futbolistas Profesionales (FUTPRO). “Mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto”, declaró dentro del escrito difundido por el organismo, que agregó una rotunda afirmación: “Expresamos nuestra firme y rotunda condena ante conductas que atenten contra la dignidad de las mujeres”.
En lo inmediato, Rubiales deberá dar su versión el próximo viernes 25 en la Asamblea General Extraordinaria que el resto de la directiva de la RFEF le solicitó “con carácter de urgencia”, a pesar de pedir perdón frente al repudio público de su accionar: “Me he equivocado, fue sin mala fe, en un momento de máxima efusividad sin ninguna mala intención”.
Polémica tras la final del Mundial femenino: presidente de la RFEF besó en la boca a una jugadora durante la celebración https://t.co/d5dS3r9nWh pic.twitter.com/642kQl2r4p
— AlbertoRodNews (@AlbertoRodNews) August 21, 2023
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