A pesar de ser una zona selvática y de limitado acceso, el Tapón del Darién se ha convertido en una peligrosa alcabala que los migrantes tienen en su camino a Estados Unidos. Las estadísticas del gobierno panameño muestran como el crecimiento del paso por esa zona ha crecido de manera alarmante, teniendo a los venezolanos como una de las poblaciones que más lo cruzan.
Por Andrés Cañizález & Miguel Ángel Valladares / Radio Fe y Alegría Noticias
En una entrevista para la cuenta @migramonitor, la presidenta de La Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), Carolina Jiménez, el periodista venezolano radicado en Panamá, Oscar Sulbarán y Elías Cornejo, Coordinador de promoción social y atención a los migrantes de Fe y Alegría en Panamá, informaron sobre las condiciones que tienen los migrantes en ese inhóspito lugar.
“El Darién es una región selvática ubicada en la provincia del mismo nombre en Panamá. El Tapón es una zona específica en la frontera con Colombia y que tiene unos 5 mil kilómetros. No hay rutas terrestres, por eso los migrantes no entran por ninguna carretera, sino que se abren paso a la fuerza en plena selva”, explicó Cornejo.
Las imágenes de cientos de miles de migrantes cruzando esta peligrosa zona recorren el mundo. Historias de robos, violaciones, asesinatos y suicidios acompañan estos relatos, pero también muchos logran pasar para dirigirse a los Estados Unidos, el destino final. En los últimos años, el aumento de personas que se aventuran a pasar por el Tapón es sorprendente.
“Para describir el drama humano que se está dando allí voy a tomar cifras del gobierno panameño. Para el 2019, 22 mil personas cruzaron el Tapón del Darién, de esos 78 eran venezolanos. Pero veamos lo que arrojaron los números para el 2022, tan solo 3 años después cruzaron 248 mil personas de las cuales 158 mil eran venezolanos. Este crecimiento de gran proporción nos tiene que llevar a la reflexión para saber el por qué 158 mil personas cruzan una selva peligrosa en la que se dan violaciones de derechos humanos”, indicó Jiménez.
La Procuraduría General de la Nación de Colombia, advirtió sobre la presencia de minas antipersonales en el Tapón del Darién, todo esto mientras el tránsito de migrantes por esa zona ha crecido en 401% entre enero y febrero de 2023. En estos meses, pero en 2022 pasaron 10.006 personas, pero en este año van contabilizadas 50.135, esto reseñado en una investigación del portal Infobae.
Desinformación, engaño y desinterés
Oscar Sulbarán es un periodista venezolano radicado en Panamá, allí se ha dedicado a investigar y buscar historias de compatriotas que cruzan el Tapón del Darién. Muchas de ellas explican que la experiencia no necesariamente tiene que ver con lo que se cuenta, por lo que los riesgos son aún mayores.
“Entre los migrantes reina la desinformación porque muchos coinciden en que, luego de cruzar los más de 100 kilómetros de selva, si hubiesen sabido los riesgos que se corren no cruzaban. Las personas están consumiendo en las redes sociales lo que quieren leer y que puede sacarlos de un lugar en el que no quieren estar e ir a otro con mayores oportunidades”.
Sulbarán indicó que ha visto como se le ofrecen paquetes turísticos a personas para cruzar el Darién en los que aseguran que será un recorrido sin inconvenientes de un par de días, cuando la realidad es otra. “Se terminan enfrentando a la violencia, violaciones sexuales, robos, entre otros”.
Recientemente, el Consejo Noruego para Refugiados incluyó a la crisis venezolana entre las 10 más desatendidas en el mundo, para Carolina Jiménez esto es preocupante. “Las tres más grandes son la siria, la ucraniana y la venezolana, las dos primeras tienen en el conflicto armado su principal detonante, pero en la venezolana esto no existe”.
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