La demanda de energías renovables sigue creciendo, pero la demanda de petróleo también. Mientras que China y EEUU avanzan hacia la descarbonización a un ritmo que pocos podrían haber previsto, el consumo de petróleo tampoco se queda atrás.
Por Ing. Álvaro Abreu / Banca y Negocios
Eso lo podemos apreciar en la perspectiva energética más reciente de la U.S. Energy Information Administration (EIA, por sus siglas en inglés), que espera que el consumo mundial de petróleo aumente este año en 1,6 millones de barriles diarios (mbpd), hasta alcanzar los 101 mbpd.
En línea con esta idea, nuestros vecinos sudamericanos, Brasil, Argentina y Guyana, ven al petróleo con gran optimismo y esperan aumentar su producción en los próximos años.
Y ¿de qué manera lo harán? Bueno, Brasil tiene el presal, unos gigantescos yacimientos en aguas profundas que se han estimado en 176.000 mbpd y su producción actual está sobre los 3 mbpd (con probabilidad de que siga aumentando).
Según Petrobras, la estatal petrolera del país, en 2022 los costos de producción fueron de US$3,5/barril. En la actualidad, Brasil es un importante exportador de petróleo.
Argentina, por su parte, no tiene una producción significativa en la actualidad. Sin embargo, tiene uno de los principales yacimientos de petróleo y gas no convencionales del mundo, denominado «Vaca Muerta», cuya producción podría llegar al millón de bpd en 2030, y que por lo tanto podría ser clave para la futura economía energética del país, señala un análisis de la consultora Rystad Energy.
Y luego está Guyana, que desde 2015 ha descubierto unos 35 yacimientos petrolíferos en alta mar. Se calcula que este país producirá 1,2 mbpd en 2027, lo que lo convertirá en el 16º productor de petróleo del mundo. Por lo que pronto jugará un rol muy importante en las exportaciones.
Entonces, ¿qué futuro le depara a Venezuela? Uno con petróleo, por supuesto. Venezuela es el país con las mayores reservas probadas de este recurso, así que su futuro no puede ser otro que el petróleo. Al menos durante las próximas décadas.
En Venezuela existe una infraestructura petrolera consolidada, no sólo a nivel nacional, sino también en el plano internacional. Por lo que, lógicamente, si el mundo no dejará de consumir petróleo, se debe seguir apostando por aumentar la producción.
Además, en esta línea, Andrés Rojas Jiménez, editor del medio de comunicación Petroguía, comentó recientemente para Circuito Éxitos que países como Colombia y México, que en años anteriores jugaron un rol importante por el lado de las exportaciones, están comenzando a disminuir su producción. Lo que abre camino para que países como Brasil, Guyana y sobre todo Venezuela, se apoderen de ese mercado.
Claro, no es una tarea fácil para Venezuela, un país que ha estado plagado de problemas socioeconómicos. Pero nuestro país tiene una increíble ventaja, tenemos un complejo de refinación en EEUU, que es denominado por muchos como la joya de PDVSA. En resumen, es el activo exterior más importante de Venezuela: CITGO.
¿Y qué es CITGO? ¿Por qué es tan relevante para la industria petrolera venezolana? ¿Cómo llega a Venezuela? Aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre CITGO.
¿Para qué refinamos crudo?
Antes de responder qué es CITGO, definamos qué es una refinería de petróleo: Como el petróleo crudo es un producto natural, presenta cierta cantidad de materiales y sustancias que influyen en su grado de pureza. Este tipo de elementos hace que el petróleo sea de poca utilidad, por lo que es necesario refinarlo.
Así pues, el refinado del petróleo es un proceso mediante el cual se elimina la mayor cantidad de impurezas del crudo y se acondiciona para usos industriales. Por ejemplo, en esta imagen de la EIA se puede apreciar lo que se produce a partir de un barril de crudo de 42 galones (equivalente a 160 litros).
CITGO, una empresa que todos querían
CITGO es una empresa norteamericana dedicada al sector de la refinación y comercialización de petróleo, cuya sede central se encuentra en Houston (Texas). Fue fundada en 1910 como Cities Service Company y posteriormente, cambió su nombre a CITGO Petroleum Corporation en 1965.
Desde su origen, CITGO fue una empresa con un crecimiento notable y era comprensible, ya que el petróleo estaba de boga, su demanda fue creciendo vertiginosamente.
Así, en los años siguientes, varias empresas estadounidenses fueron tras ella intentando comprarla. Pero no fue hasta 1986 cuando finalmente se produjo la venta, firmándose una carta de intenciones para la compra de la mitad del capital accionario de CITGO por parte de Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA).
Para ese momento, PDVSA venía de adquirir el 50% de las acciones de Nynäs Petroleum (Suecia), y de incrementar el capital accionario en las refinerías alemanas de la Ruhr Oel. En otras palabras, PDVSA estaba en plena expansión a los mercados internacionales.
Todo ese boom expansivo se realizó con el periodo presidencial de Jaime Lusinchi (1984-1989), que se caracterizó por tener una producción promedio de 1.658 mbpd y un precio promedio del petróleo de US$19.25/barril.
Durante su mandato, se enfocó en mejorar la economía de Venezuela y en fortalecer la industria petrolera del país. Para Lusinchi, una manera de fortalecer a PDVSA era proyectarla al plano internacional.
En ese sentido, su gestión impulsó la creación de empresas mixtas con compañías extranjeras para explotar y comercializar el petróleo venezolano en el mercado internacional. Además, se firmaron acuerdos con países como China y EEUU para la venta y distribución de petróleo.
En los años siguientes, el 11 de marzo de 1987, el ejecutivo nacional autoriza a PDVSA comprar la mitad del capital accionario de Champlin Petroleum en EEUU, incorporando entonces al cuadro de refinerías venezolanas en el exterior a partir del 1 de enero de 1989.
Luego, cuando termina el gobierno de Lusinchi y durante el segundo mandato de Carlos Andrés Pérez, en 1990, PDVSA adquiere el 50% de una refinería en Chicago y a esta le sigue la compra del otro 50% del capital accionario de CITGO. Haciéndose de esa manera con el 100% de la compañía.
Efraín E. Barberii, experto petrolero, afirmaba para 1990 que la capacidad de refinación instalada con la que contaba PDVSA en sus refinerías del exterior era de 833.220 barriles diarios. Organizado de la siguiente manera, la casa matriz contaba para aquel momento con un total de 16 refinerías:
– 2 en Alemania.
– 3 en Suecia.
– 3 en los EEUU.
– 1 Curazao.
– 7 en Venezuela.
En otras palabras, todas las refinerías juntas superaban para aquel entonces la capacidad de algo más de 2 mbpd. Claramente, la compra de refinerías respondía a la política de la petrolera de buscar una colocación segura del crudo venezolano en los mercados internacionales, que evidentemente fue profundizada por el periodo de Lusinchi, como destacamos antes.
CITGO: conglomerado de notables dimensiones
Beneficios millonarios y datos nada menores. Con el paso de los años CITGO siguió creciendo y en el año 2004, de acuerdo con lo expresado por el profesor y doctor en historia Rafael Arráiz Lucca en el podcast “Venezolanos”, CITGO ya era un conglomerado de notables dimensiones.
Para hacernos una idea de la dimensión, en ese año, CITGO ya era un activo tan importante para Venezuela en lo económico que llegó a capitalizar unos ingresos de 7.000 millones de dólares. Evidentemente, se trataba de una noticia positiva para el país petrolero, ya que, en principio, esa era la premisa de adquirir un activo de tal magnitud, facilitar la venta del crudo venezolano en Estados Unidos y el mundo.
Para conseguir esas cifras de ingresos, CITGO contaba en 2004 con más de 13.000 estaciones de servicio en Estados Unidos, gracias a ello, llegó a ser nada menos que el 5º distribuidor de gasolina del país, lo que representaba el 10% del mercado estadounidense de gasolina.
Además, para aquel año se había convertido en el 4º mayor distribuidor de jet fuel y el mayor distribuidor de destilados ligeros. Datos que reflejan la gran importancia de este activo para Venezuela, considerando, que se trata de Estados Unidos, la primera economía del mundo.
Al año siguiente, CITGO siguió expandiéndose: en el año 2005, la infraestructura del complejo llegó a comprender unas 8 refinerías en Estados Unidos con una capacidad total de 1.487 mbpd:
– Refinería Champlin (Corpus Christi): 157.000 bpd de capacidad.
– Refinería de asfalto de Paulsboro: 70.000 bpd de capacidad.
– Refinería Lyondell: 240.000 bpd de capacidad.
– Refinería Lemon: 167.000 bpd de capacidad.
– Refinería Savannah: capacidad para 30.000 bpd de capacidad.
– Refinería de Lake Charles: 425.000 bpd de capacidad.
– Refinería Merey Sweeney: 214.000 bpd de capacidad.
– Refinería de Chalmette: 184.000 bpd de capacidad.
Adicionalmente, contaba con unas 60 terminales y una red de distribución de 14.885 estaciones de servicio, así como contratos de suministro de crudo a 10 años por un volumen de más de 1,1 millones de bpd.
El punto de inflexión de CITGO
Sin embargo, en 2019, la administración Donald Trump impuso sanciones a PDVSA que incluían la intervención de acciones de CITGO como parte de un esfuerzo por presionar al gobierno venezolano para que abandonara el poder.
Asimismo, en años anteriores PDVSA se desprendió de muchos de sus activos debido a los problemas económicos que padecía Venezuela y de los que todos conocemos. Estos, acabaron pesando sobre CITGO.
A pesar de estos desafíos, CITGO siguió operando y dando empleo a miles de personas en Estados Unidos. Al día de hoy, CITGO opera sólo tres refinerías en Estados Unidos, las cuales, con todo y eso, pueden seguir siendo claves para la economía de Venezuela. Son las siguientes:
– La refinería de Lake Charles.
– La refinería Lemon.
– La refinería de Corpus Christi.
Refinería de Lake Charles: está situada en Luisiana y es actualmente la séptima mayor instalación de refinado de Estados Unidos, según la EIA (véase la Fig. 3). Sin embargo, si tenemos en cuenta su último aumento de capacidad ocuparía el sexto lugar.
La refinería se ha ganado la reputación de ser una de las más seguras del sector. Como la mayor de las tres refinerías CITGO, la Refinería de Lake Charles consiste en una moderna instalación de conversión profunda con una capacidad de procesamiento de crudo de 463.000 bpd.
Refinería Lemon: Está ubicada en Illinois y es un proveedor estratégico de combustibles para el transporte, sobre todo en la región centro-occidental. La refinería tiene una capacidad de procesamiento de crudo de 177.000 bpd y fabrica varios grados de gasolina, diésel, combustible para aviones y disolventes de hidrocarburos de alta calidad utilizados en la producción de pinturas, adhesivos y revestimientos.
Refinería de Corpus Christi: es una de las refinerías de combustible y petroquímica más sofisticadas y eficientes del país. Está ubicada en Texas y tiene una capacidad de procesamiento de crudo de aproximadamente 167.000 bpd y una versátil mezcla de productos, la refinería ha sido diseñada, concebida y construida para refinar crudos pesados y agrios y convertirlos en productos petrolíferos acabados de alta calidad.
Combinadas, las tres refinerías procesan unos 807.000 bpd y cuentan con una red de 4.200 estaciones de servicio en todo EEUU, un 46% y un 72% menos, respectivamente, en comparación con el año 2005.
También posee unos 30 terminales activos de productos refinados con una capacidad total de almacenamiento de 7,8 millones de barriles.
No se parece en nada a su mejor época, pero aun así, en el primer trimestre de este 2023, CITGO logró una ganancia neta de 937 millones de dólares, dijo recientemente en un comunicado de prensa.
Por su parte, el año pasado, CITGO registró un beneficio anual récord de 2.800 millones de dólares, recuperándose de dos años seguidos de pérdidas con un déficit de 160 millones de dólares en 2021.
Según el jefe de una junta que supervisa la refinería, este resultado y el del año pasado, que superaron las previsiones de la empresa, podrían utilizarse como palanca para negociar con una creciente lista de acreedores que han acudido en masa a los tribunales estadounidenses para cobrar laudos arbitrales por expropiaciones de activos en Venezuela.
Cabe señalar que estas ganancias se lograron sin la venta de crudo venezolano, que está sujeto a sanciones estadounidenses, explicó Oswaldo Felizzola, coordinador y profesor del Centro Internacional de Energía y Medio Ambiente del IESA.
De esa manera, se revela ante nosotros la gran importancia de CITGO. Pero ahí no termina la historia, porque tiene otras ventajas para Venezuela.
Dos ventajas de CITGO para Venezuela
Las refinerías están adaptadas al crudo venezolano: desde sus inicios, las refinerías de CITGO han estado adaptadas al crudo extrapesado, que representa la mayor parte de las reservas de petróleo de nuestro país. Venezuela no tiene que hacer modificaciones para vender su crudo en el país.
La ubicación de las refinerías: Estados Unidos es el mayor consumidor de petróleo del mundo. Por lo tanto, no hay duda de que en las próximas décadas este país seguirá siendo un gran centro de consumo de petróleo.
Para Venezuela esto es vital porque con la galopante transición hacia las energías limpias, nuestro país necesitará de clientes seguros que quieran nuestro petróleo. Estados Unidos podría ser uno de ellos, siempre y cuando se garantice la seguridad del suministro.
Conclusión: La imposición de sanciones por parte de Estados Unidos contra la petrolera estatal venezolana Petróleos de Venezuela (PDVSA) es un recordatorio de la enorme importancia que tiene para el petróleo los acontecimientos políticos.
El petróleo sigue y seguirá siendo el lubricante del mundo. Una vez que se eliminen las sanciones y la industria petrolera venezolana recupere la gloria que alguna vez alcanzó en términos de producción, CITGO se convertirá en algo significativamente importante para Venezuela.
De hecho, así lo señala Rafael Gallegos, que es Ingeniero de Petróleos: «CITGO es estratégico para Venezuela, es un problema que debemos abordar entre todos y con mucho sentido común».
«Antes la producción de Venezuela era de 3 millones de barriles diarios de petróleo, ahora es de 700 mil, y las refinerías tienen serios problemas. Pero no podemos perder la esperanza de rescatar la industria petrolera y cuando esto ocurra, CITGO será muy importante».
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