Los científicos de la Sociedad Italiana de Medicina Ambiental (SIMA) piden al Gobierno del país europeo que mantenga el horario de verano para hacer frente a los altos costes energéticos, disminuir la contaminación ambiental y mejorar la salud de la población, informó el diario local AdnKronos.
Los académicos de la SIMA ofrecen a las autoridades nacionales un plan para abandonar el «paso obsoleto», que permitirá a las familias y a las empresas ahorrar en sus facturas de electricidad y gas.
Muchos países del mundo suelen adelantar el reloj una hora durante el verano para aprovechar la luz natural del día y utilizar menos electricidad.
Al mantener el horario de verano, los italianos ganarían una hora de luz y calor solar al día, así como un ahorro nacional en el consumo de energía de «unos 1.000 millones de euros solo en los dos primeros años», según Alessandro Miani, presidente de la organización. Además, SIMA asegura que implementar la medida todo el año permitirá contribuir a la reducción de la quema de combustibles fósiles para la iluminación y la calefacción.
Entre otras cosas, el ahorro energético resultante de la adopción permanente del horario de verano reducirá las emisiones, que agravan el problema del cambio climático global, en un total de 200.000 toneladas de CO2 al año, lo que también podría tener un impacto positivo en la salud de los ciudadanos, agregó el experto.
«Por eso pedimos al Gobierno de [Mario] Draghi que tome inmediatamente esta decisión delegada a los Estados nacionales por el Parlamento Europeo, e invitamos a los demás países de la UE a hacer lo mismo«, añadió el presidente de la SIMA.
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