El presidente del Comité Olímpico Ecuatoriano (COE), Augusto Morán, indicó este lunes que a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 podrán acudir unos 50 deportistas ecuatorianos, aspiración que el país tiene en sus planes desde hace dos años.
Se trata de una aspiración récord para el país andino, que por el momento tiene clasificados a 41 atletas, tres más de los que acudieron a Río hace cinco años, su delegación más grande hasta ahora en catorce participaciones olímpicas.
«Las visitas constantes a los deportistas y las mediciones que realiza nuestro Departamento Técnico Metodológico nos permitieron hace dos años anticipar y sostener hasta el momento que Ecuador tendrá la clasificación de unos 50 deportistas para Tokio», dijo Morán a Efe.
E insistió en que todavía no se ha cerrado la clasificación y habrá algunas sorpresas que harán que la cifra actual llegue al medio centenar, con dos nuevos clasificados en natación de piscina y también en atletismo, donde actualmente tienen plaza 16 atletas.
Pero destacó que «lo importante es que la selección ecuatoriana no solo sea numérica, sino también muy competitiva» y se mostró convencido de que su país va «a hacer historia como en 2018 cuando en los Juegos Olímpicos de la Juventud cuando ganó siete medallas».
ASPIRACIÓN DE MEDALLAS
Ecuador sólo tiene hasta ahora a un medallista, el marchista Jefferson Pérez, oro en Atlanta 1996 y Plata en Pekín 2008, y en estos juegos aspira a rascar al menos un par de ellas con candidatos como la pesista Neisi Dajomes, el velocista Alex Quiñonez o el ciclista Richard Carapaz.
El presidente del COE está convencido de que «Ecuador romperá paradigmas y alcanzará varias de ellas, además de que, luego de Tokio, quedará una gran base de atletas jóvenes en algunos deportes, entre ellos levantamiento de pesas y atletismo» .
Morán aseveró que lo logrado hasta el momento responde al Plan de Alto Rendimiento (PAR) instaurado en 2013, y también al dedicado trabajo de las federaciones deportivas, entrenadores y el esfuerzo de los deportistas, que han tenido más roce internacional en los últimos años.
A su juicio, las principales opciones de medalla giran en torno a aquellos deportistas que han tenido mayores logros en los mundiales, y agregó a su lista a Tamara Salazar (halterofilia), Julio Castillo (boxeo), Alfredo Campo (BMX) y Glenda Morejón (marcha).
La delegación ecuatoriana esta formada por casi un 64% de mujeres, lo que para Morán «no es ninguna sorpresa porque en ellas es en las que se ha registrado un potencial de desarrollo exponencial en los últimos años.
«Esto es parte del desarrollo deportivo. La mujer está presente en el deporte ecuatoriano y estoy seguro que aportarán al país con medallas olímpicas», vaticinó.
El caso más emblemático es el que cinco pesistas alcanzaran la marca olímpica, aunque sólo viajarán cuatro por las reglas de los JJOO.
UN NUEVO PLAN
Con relación al actual Plan de Alto Rendimiento, que concluye este año tras dos ciclos olímpicos, cree que «ha sido una solución para una parte minúscula del aparato deportivo ecuatoriano, un segmento de 300 a 350 deportistas» .
Por ello defiende que «el nuevo debe estar incluido en la Ley del Deporte», para que los recursos no vengan solo través del Ministerio del Deporte sino de fuentes alternativas «como era antes, que provenían del consumo de celulares, impuestos que iban a las Federaciones ecuatorianas, al COE».
Una de las mayores quejas de los deportistas, recordó, es que «la ayuda actual llega de forma muy dilatada debido a la difícil situación del país por la pandemia, que ha generado grandes inconvenientes» y exige «otro tipo de solución, que sea mucho más eficaz». EFE