El paso de la ola tropical número 63 en la zona centroccidental ha causado estragos en la entidad larense, donde la pérdida de enseres, deslaves, vías totalmente colapsadas y pérdidas de sembradíos han sido parte de los daños ocasionados por las fuertes precipitaciones.
Daimar Díaz | La Prensa de Lara
Río Claro, Guamacire en Iribarren, y los caseríos La otra Banda, Alemán y Moruche en el municipio Torres sufrieron anegaciones por las lluvias del pasado martes.
En la zona alta de Río Claro los más afectados han sido las zonas agrícolas que tras el paso de las lluvias las cosechas quedaron entre el barro y los escombros que arrastró la corriente, dejando grandes pérdidas a los productores, ya que en esa área se cosechan café, tomate y cebolla, entre otros rubros.
«La lluvia ha acabado con los sembradíos, las cosechas quedaron sepultadas entre el barro. Es poco lo que se pueda salvar y quién sabe si se podrá volver a sembrar porque las pérdidas serán muy grandes y todo porque las quebradas no estaban limpias y por eso se desbordaron», expresó Juan Peralta, productor de Río Claro.
Calles totalmente colapsadas por el agua y el nulo paso vehicular fue la otra cara que dejó el aguacero en Río Claro. Era tanta el agua que corría por el pavimento que está se metía a las casas aumentando la tensión entre los pobladores que desesperados intentaban sacar sus enseres para evitar perderlos por completo.
Sofás, muebles de madera, camas y artefactos eléctricos son algunas de las pérdidas materiales que han registrado estas familias que ven con desconsuelo cómo su sacrificio de años para poder comprar sus pertenencias se han deteriorado en cuestión de minutos.
Para leer la nota completa, pulsa aquí
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.
