El primer ministro de Portugal, el socialista António Costa, apeló hoy a «resistir la fatiga» causada por los meses de pandemia y seguir cumpliendo las normas para limitar el riesgo de contagio en la segunda ola de COVID-19, un mensaje compartido junto con los líderes de la Unión Europea.
EFE
«Tenemos que resistir la fatiga. Todo lo que conseguimos hacer ahora para trabar la pandemia significa acercarnos al fin de la pandemia», ha dicho Costa en rueda de prensa al término de la cumbre informal mantenida por videoconferencia con los jefes de Estado y de Gobierno de la UE para intercambiar experiencias sobre la lucha contra la pandemia.
Costa resumió ante los periodistas los principales puntos tratados en la reunión, como el acuerdo de no cerrar fronteras, además de subrayar la necesidad de que los ciudadanos mantengan la distancia e higiene básicas para limitar los contagios de coronavirus.
«Países mucho más ricos que Portugal, con sistemas sanitarios más robustos, como por ejemplo Alemania, asumen que hay un límite para los sistemas sanitarios, y la única forma que hay de garantizar la capacidad sanitaria es que controlemos nosotros socialmente la expansión de la pandemia», agregó.
Su intervención estuvo centrada en lanzar llamamientos a los portugueses, también en evitar adelantar posibles nuevas medidas que vaya a adoptar su gabinete el próximo sábado, cuando se reúne de forma extraordinaria para acordar nuevas iniciativas que frenen el incremento de la curva lusa.
Portugal lleva casi una semana batiendo récords diarios de casos, con el último pico establecido hoy, cuando superó por primera vez la barrera de los 4.000 nuevos contagios, además de sumar 33 fallecidos, cifra que se aproxima al máximo diario registrado en la primera ola (37).
En total, desde que empezó la pandemia, Portugal suma 132.616 casos de COVID-19 y 2.428 fallecidos.
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