Lo que más temían los familiares de los privados de libertad era la llegada del COVID-19 a los recintos penitenciarios. Este viernes 21 y el lunes 24 de agosto, la Gobernadora del estado Lara informó que tres funcionarios de uno de los penales de esa región habían resultado positivos.
Nota de Prensa
Carmen Meléndez, gobernadora de la mencionada entidad, informó a través de su programa de radio que los dos casos eran por transmisión comunitaria. Se trata de un hombre de 30 años de edad, comandante de la Comunidad Penitenciaria Fénix Lara, y otro hombre de 32 años de edad, quien se desempeña como custodio penitenciario.
El tercer caso que indicó la mandataria regional fue un hombre de 49 años de edad funcionario de la penitenciaria.
Meléndez no detalló en cuál de los dos penales de Lara estaba destacado el custodio y el funcionario penitenciario, pero sí aclaró que los dos primeros pacientes eran asintomáticos y los tres funcionarios se encuentran aislados en el recinto penitenciario. A este caso se suman las declaraciones de la alcaldesa del municipio Bermúdez del estado Sucre, Nircia Villegas, quien confirmó la muerte de un privado de libertad, de quien detalló que tenía 29 años de edad, padecía de tuberculosis y estaba recluido en el Centro de Formación Hombres Nuevos de Carúpano y que según ella murió por COVID-19.
Carolina Girón, directora del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), compartió la preocupación de los familiares ante la presencia de COVID-19 en los recintos penitenciarios.
“Los presos son una de las poblaciones más vulnerables ante esta pandemia, considerando además que la precariedad de las cárceles venezolanas hace que un virus de este tipo sea realmente devastador. Su cuerpo no está preparado para combatirlo, están desnutridos y con enfermedades respiratorias, dos condiciones que los hace débiles ante la pandemia”, enfatizó la abogada y defensora de Derechos Humanos.
En ese sentido, Girón pidió a las autoridades regionales que se tomen medidas inmediatas para evitar un brote en ese recinto penitenciario, en donde ya han fallecido 22 presos por condición salud en lo que va de 2020. Exigió además que se hagan las pruebas PCR a toda la población penitenciaria tanto de Fénix Lara como del Centro Penitenciario David Viloria, conocido como Uribana, así como también al personal de custodia del Servicio Penitenciario y funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que se encuentran apostados en los penales.
“Necesitan una revisión médica inmediata, con especial atención a los desnutridos y una buena alimentación con las cargas calóricas adecuadas”, puntualizó la directora de OVP.
74 casos de COVID-19 en calabozos policiales
Hasta la fecha y según las informaciones aportadas por gobernadores, alcaldes y los llamados protectores de región, en cinco estados del país tendríamos presencia de COVID-19 en varios Centros de Detención Preventiva, para un total de 74 presos con resultados positivos.
Hasta ahora se han registrado 2 casos en Lara, uno en la policía del estado y otro en la Guardia Nacional; 4 en una sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) en Miranda, 5 en Barinas, 9 en Táchira, ambas en la sede del CICPC; y 54 en Nueva Esparta, de las cuales 36 son en la comandancia de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), 17 en la sede del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (CONAS) de la GNB y 1 del que no se especificó en qué sede policial se encuentra.
Al respecto, la directora del OVP recalcó que el hacinamiento en los calabozos policiales de Venezuela es crítico, por lo que de manera urgente se deben adoptar medidas que impidan la proliferación del virus entre la población reclusa.
Prensa Observatorio Venezolano de Prisiones
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