Uno de los coletazos de la decisión de dictarle medida de aseguramiento al expresidente Álvaro Uribe, es la suerte que correrá su curul en el Senado de la República en momentos atípicos.
La detención domiciliaria no le impediría asistir a las sesiones virtuales de Senado, a menos que la Corte imponga una restricción explícita cuando haga públicos los alcances de su decisión. Así se lo confirmaron expertos a EL TIEMPO.
Agregaron que Uribe puede pedir una licencia temporal para ejercer su defensa. En ese escenario se tendría que llamar a la siguiente persona en votos en la lista del Centro Democrático.
El otro camino es que Uribe renuncie. En ese caso también se llamaría al siguiente en la lista: Yenny Rozo Zambrano, exdiputada de Cundinamarca, quien se quemó con 24.930 votos.
Rozo estuvo en la campaña presidencial de Iván Duque y en sus redes sociales es una férrea defensora de lo que considera es el legado de Uribe, por lo que, incluso, este mismo martes salió a criticar la decisión de la Corte que le impone detención domiciliaria al exmandatario.
En todo caso, si Uribe renuncia, la Corte seguiría con su caso, según lo establecieron en la época de la parapolítica cuando varios congresistas renunciaban para quedar en manos de la Fiscalía y tener doble instancia, que ahora ya existe en el alto tribunal.
Ver guerrilleros que han violado, asesinado, secuestrado traficado etc.. sentados en el congreso y al hombre con el corazón más grande de Colombia privado de su libertad me parte el alma. https://t.co/73YhB37BaA
— Yenny Rozo Zambrano (@YennyRozoZam) August 4, 2020
Pero desde el Congreso descartan de plano que se aplique la figura de la silla vacía. Según el artículo 134 de la Constitución, hay al menos cuatro causales explícitas para que se aplique esta medida, lo que significaría que el partido -en este caso de gobierno- perdería automáticamente la curul.
De acuerdo con la carta política, la silla vacía aplica cuando hay sentencia o medida de aseguramiento por «pertenencia, promoción o financiación a/o por grupos armados ilegales, de narcotráfico, delitos contra los mecanismos de participación democrática o de lesa humanidad». Y por ninguna de estas causales está siendo judicialmente procesado el expresidente y senador.
El caso más reciente de aplicación de la llamada silla vacía es el del exguerrillero ‘Jesús Santricht’, ahora en las disidencias de las Farc y procesado por narcotráfico en Estados Unidos.
Por ahora, el Centro Democrático entró en la tarde de este martes en un cónclave para analizar la forma en que se saldrá a respaldar a su máximo líder y, de paso, para establecer los caminos que como partido deben tomar durante los dos años legislativos que aún tienen en el Congreso. Y ahí es cuando definirán qué hacer con la curul del senador y expresidente Uribe.
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