Cuba anunció este viernes otras tres muertes por COVID-19 que dejan un acumulado de 64 desde el comienzo de la pandemia, mientras los casos positivos ya suman 1.537 al sumarse 36 nuevos contagios, según el parte diario del Ministerio de Salud Pública (Minsap).
EFE
Los fallecidos, cuyos decesos se produjeron en la víspera, son tres personas de La Habana de 86, 72 y 58 años que ya padecían patologías crónicas antes de contraer el coronavirus SARS-CoV-2, indicó el director de Epidemiología del Minsap, Francisco Durán.
Los 36 nuevos casos del viernes suponen un ligero ascenso respecto a los 34 del día anterior, aunque el dato se mantiene en la línea de las últimas dos semanas en las que los positivos diarios oscilaron entre 20 y el medio centenar.
De los nuevos contagios, 29 corresponden a residentes de La Habana, que es la región más afectada por el coronavirus con más de un tercio del total.
El doctor indicó que 24 de los 36 positivos del día (dos tercios) eran asintomáticos cuando se les realizó la prueba. Además, 31 eran contactos de casos ya confirmados y en 5 no se ha logrado averiguar la fuente de contagio.
Para detectar las 36 infecciones se completaron 2.062 pruebas PCR, lo que supone la segunda jornada consecutiva en el que estos test superan los 2.000 diarios (los días anteriores se venían realizando unos 1.800 en promedio).
En total se han llevado a cabo 49.049 pruebas hasta la fecha, complementadas por decenas de miles de test rápidos con kits procedentes de China.
Seis personas permanecen en estado crítico y otras cuatro graves en las salas de cuidados intensivos de los hospitales cubanos, mientras 747 evolucionan de manera estable sin presentar mayores complicaciones. Otras dos fueron evacuadas en las pasadas semanas a sus países de origen.
Este viernes se anunciaron 33 nuevas altas, lo que deja en 681 el número de personas completamente recuperadas del coronavirus SARS-CoV-2, más de un tercio de los casos.
Por otro lado, 2.897 ciudadanos se encuentran ingresados en centros sanitarios al considerarse sujetos de riesgo y otros 3.892 permanecen bajo vigilancia clínico-epidemiológica en atención primaria.
Cuba se mantiene en fase pre-epidémica del coronavirus con transmisión autóctona limitada, por lo que el Gobierno aplica medidas preventivas como la suspensión del transporte público, el cierre de fronteras salvo casos excepcionales y la clausura de escuelas y los mayores centros comerciales.
El uso de la mascarilla es obligatorio en espacios públicos y, aunque no hay confinamiento forzado, se ha pedido a los ciudadanos no salir de casa excepto para actividades imprescindibles como ir a la compra o hacer trámites.
También se han extremado las condiciones de aislamiento en puntos específicos del país donde se han detectado mayores focos de contagio, entre ellos varias zonas de La Habana.
El pico de la epidemia podría producirse la próxima semana, según anunció este lunes un grupo de expertos cubanos, que adelantaron la fecha algunos días respecto a la prevista anteriormente.