“Desde hace un mes se vienen realizando en Táchira racionamientos eléctricos descontrolados”, precisó a Descifrado el diputado Eduardo Marín.
Por Luis David Vásquez / Descifrado
Los cortes de energía deberían ser de 4 o 5 horas. “Pero eso nunca ha sido así”.
San Cristóbal, capital del Táchira, pasó más de 10 horas sin servicio eléctrico este martes, 18 de febrero, “y algunos municipios han pasado más de 24 horas sin energía”.
El día 18 explotó un transformador de energía en la avenida principal de Santa Teresa, San Cristóbal. La crisis se agudizó el miércoles 19.
En compañía de 120 familias el diputado se dirigió a la sede de Corpoelec Táchira para exigir la restitución del servicio pero la respuesta de los empleados públicos no fue la deseada.
“No tenemos autorización para salir a atender ninguna contingencia porque el Estado (Táchira) se encuentra totalmente apagado”, dijo uno de los trabajadores.
Y se le chispoteó minutos después que no se querían exponer a las protestas que hacen los venezolanos en los andes por la exigencia de sus derechos. “No tenemos autorización para salir a reparar el transformador”, insistieron.
“Obviamente la gente está muy molesta -enfatizó el diputado-, ya se les dañó la comida, también aparatos eléctricos. La gente está desesperada porque los puntos no funcionan. Es una locura lo que se está viviendo en Táchira”.
Los tachirenses padecen la escasez de agua y el colapso del transporte público además de la crisis eléctrica
“Desde hace un mes se vienen realizando en Táchira racionamientos eléctricos descontrolados”, precisó a Descifrado el diputado Eduardo Marín.
Por Luis David Vásquez / Descifrado
Los cortes de energía deberían ser de 4 o 5 horas. “Pero eso nunca ha sido así”.
San Cristóbal, capital del Táchira, pasó más de 10 horas sin servicio eléctrico este martes, 18 de febrero, “y algunos municipios han pasado más de 24 horas sin energía”.
El día 18 explotó un transformador de energía en la avenida principal de Santa Teresa, San Cristóbal. La crisis se agudizó el miércoles 19.
En compañía de 120 familias el diputado se dirigió a la sede de Corpoelec Táchira para exigir la restitución del servicio pero la respuesta de los empleados públicos no fue la deseada.
“No tenemos autorización para salir a atender ninguna contingencia porque el Estado (Táchira) se encuentra totalmente apagado”, dijo uno de los trabajadores.
Y se le chispoteó minutos después que no se querían exponer a las protestas que hacen los venezolanos en los andes por la exigencia de sus derechos. “No tenemos autorización para salir a reparar el transformador”, insistieron.
“Obviamente la gente está muy molesta -enfatizó el diputado-, ya se les dañó la comida, también aparatos eléctricos. La gente está desesperada porque los puntos no funcionan. Es una locura lo que se está viviendo en Táchira”.
Los tachirenses padecen la escasez de agua y el colapso del transporte público además de la crisis eléctrica