Lo atípico reina esta nueva temporada de Béisbol profesional venezolano. Además de la serie de condicionantes que tuvo este torneo, el fanatismo parece que tampoco podrá seguir con su tradición. Lo que antes era un espectáculo a casa llena, este jueves se desarrolló uno de los escenarios más vacíos que ofrece una temporada de béisbol venezolano.
Los fanáticos de Caracas y Magallanes prácticamente madrugaban y hacían magia para poder obtener las entradas y asistir al encuentro de los «eternos rivales». Sin embargo, la crisis que aqueja al país impide que esa constante se mantenga en la vida de los venezolanos que ha tenido que sacrificar un 85% lo que hacía antes de de que la inflación aniquilara su calidad de vida.
Así luce el Estadio Universitario de Caracas en el primer encuentro del clásico del béisbol venezolano:Caracas vs. Magallanes. Se trata de una temporada atípica: más corta, menos presupuesto, que empezó un mes más tarde y con menos jugadores importados 6 en lugar de 8). pic.twitter.com/tI3DUJjRSV
— Osmary Hernandez (@osmarycnn) November 7, 2019
En definitiva es un evento que estuvo lleno de contratiempos, pero también condicionada por «el modo ahorro», tal como lo definió el propio gerente de la LVBP, pues también comenzó un mes más tarde de lo habitual.
Comenzó el primer juego de la temporada entre Navegantes del Magallanes y Leones del Caracas.
Así está el estadio. pic.twitter.com/3LQXBRsydg
— Darvinson Rojas (@DarvinsonRojas) November 7, 2019
Y es que ya nada puede ser igual, el desligarse del régimen de Nicolás Maduro tuvo sus consecuencias. El presupuesto depende netamente de los equipos y por ello se diseñó un torneo más corto que contó con la reducción de los jugadores importados, -seis, en vez de ocho-,
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