Si nada extraño sucede, José Antonio Kast luchará el año próximo por tercera vez consecutiva por la presidencia de Chile, y lo hará con posibilidades de ganar. El líder de la derecha dura en la quinta economía de América Latina podría medirse a la ex presidenta Michelle Bachelet, de 72 años, y a otra veterana de la política, Evelyn Matthei, de 70.
«Gabriel Boric lo hizo muy mal, porque no dejó legado. Nadie va a tomar el legado de Boric», dice Kast, de 58 años, durante una entrevista con EL MUNDO en Buenos Aires en un alto de la tercera edición regional del Foro Madrid, promovido por Vox en la capital argentina. A finales de 2021, Kast perdió con Boric, hoy de 38 años, en las elecciones por el Palacio de La Moneda.
- Cuando se escribe sobre usted, la prensa internacional lo define como ultraderechista, de derecha extrema, derecha dura. ¿Qué es usted?
- Yo soy de derecha. Siempre lo que planteamos es que representamos el sentido común y la libertad. Y eso es lo que la ciudadanía ha reconocido en nosotros.
- No se reconoce entonces como un ultra.
- Es que no. Porque no hemos planteado nada que salga del marco de los principios que permiten el desarrollo de una sociedad libre. Por lo tanto, no nos hacemos cargo de eso. Generalmente las críticas vienen de un sector bastante ideologizado de la izquierda. Que no se reconocen como izquierda roja. Que no se reconocen como radical. O no reconocen las dictaduras como la de Venezuela, la de Nicaragua, la de Cuba. Haber logrado un 44% de los votos deja en evidencia que la ciudadanía vota por alguien que tiene ideas razonables y de sentido común.
- ¿Hizo todo mal Boric? ¿O hay cosas que rescata?
- Yo creo que no hay mucho que rescatar. Por no decir nada. Porque él desperdició una gran oportunidad de ser jefe de Estado y se convirtió en el jefe de campaña de un proyecto refundacional de Chile que la gente rechazó.
- ¿No rescata su política exterior, el hecho de que haya sido muy claro en la crítica a Cuba, Venezuela, Nicaragua?
- Ha sido claro en la crítica a Nicaragua. Hoy día ha sido claro en la crítica a Venezuela. Nunca ha sido claro en la crítica a Cuba. Que es de donde todo surge en el fondo. Su Gobierno no es capaz de plantear que Cuba es una dictadura. Él comparte su gobierno con integrantes del Partido Comunista que avalan lo que está ocurriendo en Venezuela, en Nicaragua y en Cuba.
- Todo indica que usted volverá a ser el candidato de Los Republicanos y que una de sus rivales podría ser la ex presidenta Bachelet, ¿qué le parece que aspire a una tercera presidencia?
- Me parece bien que ella vaya y responda por la crisis en la que se encuentra Chile hoy día.
- ¿Ella es la responsable?
- Absolutamente. En temas de migración. Ella permitió la primera gran migración a Chile, de Haití hacia Chile. Con una línea aérea falsa y tráfico de personas reconocido por su propio canciller. Ella hizo las modificaciones que hacen que hoy la educación esté por el piso, ella subió los impuestos e impidió el crecimiento del país.
- ¿Con quién se identifica más: Trump o Milei?
- Milei levantó a Argentina, volvió a darle esperanza de que puede resurgir haciendo bien las cosas, achicando el estado, siendo eficiente, austero. Eso es algo que nosotros hemos planteado. Y en el tema de Estados Unidos yo diría que necesitamos una mirada distinta a la que ha sido la mirada demócrata hacia Latinoamérica. Nosotros necesitamos que Estados Unidos enfrente situaciones como la de Venezuela, un cáncer para la democracia en toda Latinoamérica.
- Un ex asesor de Trump aseguró que el ex presidente admiraba a Maduro. Tampoco puede decirse que la política de Washington hacia América Latina haya funcionado en los cuatro años de Trump, ¿o cree que sí?
- Yo diría que uno va aprendiendo con el tiempo. Estados Unidos está sufriendo hoy día las consecuencias de migraciones masivas por regímenes dictatoriales en Latinoamérica. La mirada tiene que cambiar.
- ¿Qué le genera Kamala Harris?
- No conozco a Trump, tampoco conozco a Kamala Harris. Sí sé que no ha sido precisamente alguien que haya tenido una mirada propositiva o colaboradora con Latinoamérica.
- En realidad Biden le dio la responsabilidad de la frontera sur y del Triángulo Norte de Centroamérica. Sí ha tenido vínculo con la región.
- No tengo el detalle, pero claramente no ha sido exitosa.
- Chile está preocupado por el auge de la delincuencia, ¿es aplicable la experiencia de Bukele?
- Estuvimos en Salvador y claramente hay cosas que se pueden llevar a la práctica. El crimen organizado es una empresa y muchas veces tiene más herramientas que el propio Estado.
- En su momento usted propuso construir una zanja en la frontera con Bolivia y Perú, ¿mantiene esa idea?
- Por supuesto. Y de hecho la izquierda la ha valorado después de haberla criticado ampliamente. El altiplano es una especie de meseta donde se puede circular libremente de un país a otro. Y eso permite el contrabando, la trata de personas y el robo permanente de vehículos en Chile. Si en la frontera no tengo un límite claro, lo que voy a hacer es una confrontación hombre a hombre.
- ¿Conoce algún antecedente de una zanja como frontera?
- Estuvimos en Hungría, vimos el control fronterizo con el que llevaron a cero todo el flujo migratorio que viene de Próximo Oriente e ingresa por Serbia. Dos vallas metálicas con un camino intermedio. Ha sido totalmente efectivo.
- ¿Qué haría con Venezuela si es presidente?
- Encabezar, junto con otros países, todo lo que es la denuncia en los organismos internacionales del dictador. Llevarlo al tribunal internacional. Es muy importante que el tribunal Penal Internacional dicte una orden de aprehensión.
- Es lo que votó el Senado de Chile días atrás.
- Eso tiene que ser replicado en distintos países, que Lula y AMLOreconozcan que hay una dictadura. Tenemos que sumar fuerzas para enviar a Maduro a la cárcel. Lula va a tener que reconocer que hay violación de los derechos humano y quitarle todo tipo de respaldo.
- En el Foro de Madrid se habló de que hay presos políticos en Brasil por la asonada golpista del 8 de enero de 2023. ¿Usted cree eso?
- En muchos países los tribunales supremos hoy día son, más que tribunales, legisladores supremos que cruzan las fronteras de cada uno de los poderes. No es entendible que en Brasil el Tribunal Supremo dicte sentencias en contra de parlamentarios.
- ¿Qué opina del gobierno de Pedro Sánchez?
- Que ha transado [cedido] el poder con grupos minoritarios que son separatistas, algunos han acogido a ex terroristas. Y creo que eso le hace mal a la democracia. Sánchez le está haciendo un daño a la patria. Y por otro lado creo que tiene que aclarar muy bien los temas judiciales que están afectando a su esposa y a su hermano.
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