El Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó a un pakistaní supuestamente vinculado al Gobierno de Irán de intentar llevar a cabo asesinatos políticos, un caso que llevó al Gobierno de EE.UU. a aumentar la seguridad del expresidente Donald Trump y de otros funcionarios, según un documento hecho público este martes.
Los investigadores del FBI creen que Trump y otros funcionarios y exfuncionarios del Gobierno de EE.UU. eran los objetivos previstos del plan, dijo un funcionario de EE.UU. informado sobre el asunto.
Asif Merchant, de 46 años, está acusado de viajar a Nueva York y trabajar con un asesino a sueldo para llevar a cabo los asesinatos a finales de agosto o principios de septiembre, según los cargos presentados por los fiscales federales en Brooklyn, Nueva York.
Merchant fue detenido el 12 de julio cuando se disponía a salir de Estados Unidos, según la fiscalía, poco después de reunirse con supuestos sicarios que él creía que cometerían los asesinatos, pero que en realidad eran agentes de la ley infiltrados. Se encuentra bajo custodia federal.
El FBI investigó el supuesto plan internacional de asesinato por encargo semanas antes de que un joven de 20 años de Pensilvania casi asesinara al expresidente en uno de sus mítines. Un funcionario de las fuerzas del orden dijo a CNN que los investigadores no han encontrado pruebas de que Merchant tuviera relación alguna con el tiroteo de Butler (Pensilvania).
El FBI cree haber desbaratado el plan de Merchant antes de que se produjera ningún atentado, y en las semanas transcurridas desde su detención ha cooperado con los investigadores, según funcionarios estadounidenses. Pero las conocidas amenazas del gobierno iraní contra Trump llevaron al FBI a transmitir la información al Servicio Secreto de EE.UU., que aumentó la protección de seguridad para el expresidente, han dicho los funcionarios.
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